En la Revista Ñ de ayer salió publicado un artículo de Tzvetan Todorov, titulado «¿Qué es ser civilizado?». De éste autor sólo había leído «La Conquista de América. La cuestión del otro», obra muy utilizada en el ámbito de educación terciaria para trabajar el tema de la conquista, ya que ofrece una reconstrucción histórica a partir del análisis de las mentalidades, aquello que nos permite conocer cómo se pensaba y actuaba en una época determinada. De esa lectura surgió uno de los primeros artículos de éste blog: Moctezuma y Cortés.
En ésta oportunidad, Todorov formula una respuesta a todos aquellos partidarios del «choque de civilizaciones» de Samuel Huntington. Empieza describiendo uno de tantos estereotipos del ser humano «civilizado», representado en la figura de un sujeto que usa corbata, traje, es educado, usa cubiertos para comer y se corta las uñas. Por supuesto, usar un traje no asegura que cometas barbaridades de cualquier tipo, entonces, creer que la cultura se mide en clave de «civilización y barbarie» es errado. Y estoy de acuerdo, porque probablemente tenemos un poco de las dos cosas en cada uno de nosotros. La crítica del autor en éste punto, va dirigida al ensayo «Las religiones asesinas» de Elie Barnavi, por el siguiente argumento:
«Existe civilización por un lado y barbarie por otro. No existe un diálogo posible entre ambas.»
Todorov destroza esa idea, de forma constructiva claro, afirmando que no es posible reducir todas las producciones culturales en un binominio tan exclusivo.
En consecuencia, introduce su interpretación sobre los conceptos de cultura y civilización, diferenciando entre la forma singular y plural de cada término: Cuando hablamos de ‘culturas’ se trata de modos de vida adoptados por diversos grupos humanos, donde sus miembros reconocen una serie de elementos en común (idioma, religión, estructuras familiares, dieta, vestimenta, entre otos.). Pero hablar de cultura, es hablar de una categoría descriptiva sin juicios de valor. En cambio cuando se usa el término de ‘civilización’ sí aparecen los juicios de valor, porque como categoría moral, se opone a todo lo malo que supuestamente entraría en la categoría de ‘barbarie’.
A partir de aquí, el autor muestra la dificultad tanto del término civilización, como su forma plural (civilizaciones). En realidad hay pluralidad de culturas, y nosotros mismos somos mosaicos compuestos por aportes de varios códigos culturales, complementariamente a la forma que adquirimos dependiendo del sexo, grupo etario, salud, clase y trabajo. Esta realidad de mosaico nos permite no sólo compartir códigos diferentes, sino también desterrar la creencia en que todos los encuentros entre culturas se dan de forma violenta. La respuesta formal contra los seguidores de Huntington, y del esquema civilización-barbarie, es que hay que reinstalar la idea del diálogo, sólo así podrías decir que eres «civilizado», y no discriminando otros modos de vida como lo hace el esquema c&b. Pero ese diálogo plantea 2 desafíos temporales: uno político, y otro cultural. En palabras de Todorov:
Política y cultura no funcionan en el mismo nivel, la primera gobierna la acción, la segunda puede llevarle generaciones producir algún resultado.
Teniendo esa realidad en cuenta, el autor propone metas pequeñas, como un ejemplo de acción en el ámbito académico: aumentar el intercambio de ideas y literatura de otros países, facilitar programas de intercambio de estudiantes, habilitar varios talleres de idiomas, más talleres y debates de problemáticas multiculturales, entre otras medidas.
¿Qué es ser civilizado? No lo sabemos, pero si sabemos que hay que tratar de generar puentes entre todos los que podamos.
Bibliografía:
– Todorov, Tzvetan: «¿Qué es ser civilizado?», en Revista Ñ, nº 245, Clarín, 07-06-2008. Indíce disponible online:
<http://www.revistaenie.clarin.com/notas/2008/06/07/01688619.html>
– Fava, Paolo: «Todorov: «La globalización es maravillosa para la literatura»», Papel en blanco, 26-11-2007, Consultado el 08-06-2008. [Foto: tzvetan_todorov.jpg]
<http://www.papelenblanco.com/2007/11/26-todorov-la-globalizacion>